La mujer Virgo 2

Es probable que hayas descubierto incluso lo divertida que es cuando no se la presiona, y lo despierto que es el ingenio que se oculta en su linda cabecita. Hay algo amable y extraño en la risa de la mujer Virgo, que cuando se suelta suena como un repique de campanillas.
Como no tiene ilusiones, no intentes venderle espejismos. Para ella, la verdad es belleza, y la belleza es verdad. Acostúmbrate a aceptar que limpie los ceniceros cada tres minutos, ten paciencia con los gatitos que recoja, y tendrás quien se ocupe con femenina gracia de la rutina de la pipa y las pantuflas. Solamente con alguien en quien confía se compartirá ella, cautelosamente, y para Virgo las cosas pequeñas significan mucho. Pese a su modestia y timidez naturales, tiene la fuerza y la reciedumbre suficiente para que otros puedan encontrar en ella consuelo ante la tormenta. El silencioso valor y el profundo sentido de la responsabilidad de la mujer Virgo actúan con frecuencia como un mágico cemento que mantiene unidas a las familias grandes. Es probable que sea buena cocinera, y jamás te envenenarás con la sopa que ella haga. Encontrarás tu casa limpia y acogedora, y sobre la mesita del café un gran tazón lleno de manzanas, no de bombones de chocolate (que son perjudiciales para los dientes y para la salud, en general).
Probablemente nunca verás a tus hijos corriendo por el barrio con las narices sucias, la cara pringada de mermelada o las zapatillas rotas. Tampoco te encontrarás deditos que te rompan los cigarrillos o que pinten a la acuarela tus papeles personales. Ella se ocupará de la disciplina. Es raro que la mujer Virgo tenga más de uno o dos hijos, parece que la maternidad no fuera necesaria para satisfacer su feminidad. Pero una vez que el bebé haya irrumpido en su vida, Virgo jamás olvidará sus necesidades físicas, morales o educacionales. Es posible que no le resulte tan fácil satisfacer a su hijo en sus necesidades emocionales, pero si se siente segura de tu amor y sabe que la valoras, se relajará y rodeará a vuestros vástagos de cálido afecto. Los pequeños suelen hallar deliciosamente gratas y dulces a las mamás Virgo. Dentro de su firmeza y de su empeño en inculcar buenos hábitos, tienen un toque de ternura que da al niño la seguridad de su amor.
¿Recuerdas un poema que dice que con tu última moneda no debes comprar pan, sino “jacintos para el alma”? A esa mujer dale ambas cosas. Frecuentemente, la encontrarás ocupada cosiendo o remendando y, si tu mujer es típica de su signo, es posible que tu casa esté llena de una mezcla celestial de perfumes: el de las flores frescas y el del pan casero que sube, crujiente, en el horno.
Muy gratos al llegar a casa. Ella desempolvará todos tus viejos sueños hasta hacerlos brillar de nuevo, y tendrás una mujer que jamás te pedirá la afeitadora ni usará tu cepillo de dientes para pintarse las pestañas. Cuando estés enfermo, te cuidará como un ángel, y jamás te pondrá en una situación incómoda flirteando con tu mejor amigo. Será pulcra en el vestir, y con ella podrás hablar de algo mas que de pañales y de los comentarios del salón de belleza. Recibirás toda la lealtad y devoción que te mereces, y ella no te hará escenas de celos ni dilapidará a tontas y a locas el dinero. Guardará en su corazón tus secretos, te ayudará a organizar tu trabajo, y no es probable que su cutis se arrugue al alcanzar la madurez. Dime sinceramente si no vale la pena que cuides tus modales y no te olvides de limpiarte las uñas. Sus ojos son frescos lagos de puro amor y, cuando sonríe es capaz de iluminar toda la habitación. Mejor que la cuides, que tal vez nunca volverás a tener tanta suerte.

Signo Virgo