Tauro ascendente Leo

Tierra y Fuego

Cuando se trata de aprovechar grandes oportunidades, nadie diría que usted es rápido: se mueve a la velocidad de un caracol amodorrado y no puede cambiar de dirección sin entregarse antes a una tediosa sesión de reprogramación.

Pero cuando ha identificado un proyecto que le importa o una ambición deseada con fervor, nadie puede vencer su obstinada determinación de concretarla.

Usted es trabajador como una máquina, pero a menudo esa adicción al trabajo hace que los demás lo consideren un egoísta autoritario.

Usted ansia una buena vida, estabilidad, comodidad y la admiración de los demás, y no repara en gastos ni esfuerzos; el problema es que tiende a utilizar también el esfuerzo de otras personas.

En realidad, a muchas no les importa esclavizarse por usted porque están hechizadas por su poderosa personalidad. Generoso cuando las cosas andan bien, a usted le gusta dar con prodigalidad.

Sin embargo, suele hacer caso omiso de los problemas ajenos sí tiene problemas propios, y no ser tan generoso como cree…

Nadie podría llamarlo mezquino, no obstante, y tiene un temperamento volcánico que se enfría tan rápido como estalla.

Pero se ofende con facilidad, y a diferencia del Tauro típico, no es proclive a perdonar del todo. En cuanto al amor, recuerde que los regalos hermosos no pueden reparar los sentimientos heridos.

Piense antes de hablar y no traiga problemas exteriores al hogar.

Tauro ascendente Leo es material inflamable en la cama, pero su insensibilidad puede hacer que esté solo cuando se despierte.