Si se trata de proteger al prójimo pocos signos estarán mejor dispuestos a hacerlo que Cáncer.
Como se trata del signo de la Gran Madre, la fórmula de oro es ponernos en hijos, mostrarnos débiles, dependientes, algo asustados, faltos de cariño y contención. Incluso el ardid puede tener mejor efecto si nos quejamos de la falta de solidaridad de nuestra propia familia.
El único caso en el que Cáncer puede negarse a prestarnos su ayuda es si con su actitud perjudica a una persona que considera de su clan, sea un pariente, un amigo o un compañero de trabajo.
En cambio, cuando hay que beneficiar a un niño, un animalito, un enfermo o alguien que está muy solo jamás dirá que no, porque es más bueno que el pan.
Como se trata del signo de la Gran Madre, la fórmula de oro es ponernos en hijos, mostrarnos débiles, dependientes, algo asustados, faltos de cariño y contención. Incluso el ardid puede tener mejor efecto si nos quejamos de la falta de solidaridad de nuestra propia familia.
El único caso en el que Cáncer puede negarse a prestarnos su ayuda es si con su actitud perjudica a una persona que considera de su clan, sea un pariente, un amigo o un compañero de trabajo.
En cambio, cuando hay que beneficiar a un niño, un animalito, un enfermo o alguien que está muy solo jamás dirá que no, porque es más bueno que el pan.