Venus y el Amor en Astrología

Venus y el Amor en Astrología

El amor es seguramente el sentimiento humano que ha hecho correr más ríos de tinta desde que el hombre sabe escribir. No podemos negarle el papel primordial que ocupa en nuestra vida. Aunque, mirándolo bien, cualquiera que sea la época, la cultura y la civilización, el amor, bajo sus múltiples aspectos y manifestaciones, siempre fue el mismo.

Sin embargo, así como con las 7 notas de la escala musical obtenemos infinitas combinaciones armónicas, el amor tampoco deja nunca de sorprendernos, de maravillarnos y, por supuesto, también de ponernos a prueba.

En función de cómo lo vivimos o soñamos, imaginamos, consideramos o idealizamos, nos hace hermosos, inteligentes, valientes… o, al contrario, monstruosos, idiotas o cobardes. Nos impulsa a realizar tanto proezas como cualquier tontería.

Pero, en todo caso, podemos considerar que el amor nos lleva a ser más conscientes de nosotros mismos, de nuestros límites, de nuestras dependencias, de nuestras emociones y de nuestra capacidad de dar y recibir.

Por ello, aunque Venus sea el astro del amor o, más concretamente, si su posición en una carta astral nos informa sobre la experiencia de los sentimientos, emociones y motivaciones de un ser, no podemos negar que en sí mismo este planeta representa una fuente de informaciones valiosas y fundamentales.

Venus o la iniciación al amor

Pero en este caso, debemos abordar nuestra interpretación de Venus en una carta astral desde la clave de las informaciones indicadas sobre el comportamiento amoroso de un ser.

En efecto, ¿no te parece que, casi siempre, nos cuesta amar, hacernos amar y todo lo que vivimos en el registro del amor -se trate de relaciones amorosas íntimas y privilegiadas entre dos seres o, más ampliamente, de relaciones afectivas que cultivamos con nuestros padres, nuestros allegados y amigos- nos sumerge en una especie de confusión de sentimientos, en un inefable clima de angustia e incertidumbre, más que en una sensación de plenitud?

¿Por qué el amor es tan difícil de vivir? Tal vez, simplemente, porque queremos poner límites a algo que no los tiene o que no está hecho para tenerlos.

La situación de Venus en una carta astral nos permite comprender cómo un ser es capaz de vivir el amor y, en nuestra opinión, cómo va a realizar su aprendizaje del amor.

El zodíaco nos ofrece, pues, 12 instrucciones diferentes, si se permite tal interpretación, y, todavía mejor, 36 expresiones puras y originales del amor, si tenemos en cuenta los decanatos.

Pero, evidentemente, su posición en las Casas, así como los eventuales aspectos que forma también debemos tenerlos en cuenta y añadirlos a nuestro análisis, para que pueda resultar más preciso y afinado.

Por otro lado, al estudiar la situación de Venus en una carta astral, nunca debes olvidar que, aunque todas las historias de amor se parecen, cada ser tiene una manera personal e íntima de experimentar sus sentimientos y que, en su experiencia, intervienen muchos parámetros inherentes a la personalidad. Por ello, es legítimo considerar a Venus el instrumento de nuestra iniciación al amor.