Hijo Aries, padre Tauro

Papá Tauro detesta los cambios y su hijo Aries los adora. Este detalle es uno más de una larga relación de desencuentros que ocasionará numerosas tormentas, pero también muchísimos momentos de pleno sol.

El niño Aries, amante de los desafíos, gozará sacudiendo los seguros fundamentos de la rutinaria vida de su padre, y para eso se vestirá con ropas chillonas y seguirá el último grito en dietas exóticas.

Desesperados por explorar la vida por sus propios medios, los niños de Aries se realizan con los riesgos que Tauro odia, y se escabullen ante cualquier clase de responsabilidad. Y cuando el feroz Aries choca contra la oposición mundana de papá Tauro: ¡Plum! Es como golpearse contra una pared: por más que Aries ruegue, adule, grite o desvaríe, Tauro se mantendrá firme; y si lo provocan demasiado, desatará su terrible temperamento.

Y aunque Aries necesita desesperadamente pautas para vivir, si se le reprime con demasiada frecuencia, existe el peligro de llegar a amargar su carácter naturalmente alegre. Incluso Aries es incapaz de recuperarse con facilidad muchas veces seguidas, así que papá Tauro debe hacer un esfuerzo para ser flexible. Con seguridad parte de su sentido común echará raíz en el impulsivo Aries y será una bonificación para el futuro.

Tauro, con su mentalidad materialista, evitará tratar de comprar el afecto de Aries con dinero o regalos, aun cuando ésa sea la manera más fácil de conservar la paz. Porque también sería el primer paso en el resbaladizo precipicio hacia un niño horriblemente malcriado. Mientras tanto, Aries debe hacer un esfuerzo para aceptar la naturaleza «anticuada» de su padre ¡Por lo menos no será un rival en los juegos de energía!

Signo Aries